Cuando ves la entrada de esta casa llena de hojas caidas y con esas rejas antiguas, te recuerda a esas películas algo tenebrosas donde cuando menos te lo esperas te dan un sobresalto y aparece alguien con malas intenciones, pero ... nada más lejos de la realidad, es una casa construida en el año 1.760 y renovada recientemente, que se encuentra en la población de Breukelen, Holanda.
¿Verdad que parece otra cuando entras en ella? Toda blancura y delicadeza, es una casa cómoda y sencilla que tiene su mayor baza en la altura de sus techos y la amplitud de sus espacios. La madera como conexión entre las diferentes estancias, la escalera abierta y moderna, una cocina de diseño, y un salón, cuanto menos original, hacen de ella un espléndido lugar donde vivir el presente, aunque recordando el glorioso pasado que debió tener.
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