Según sus propias palabras, la diseñadora Amanda Reid de Mandarina Studio, proyectó esta habitación de bebé para que fuera muy funcional y sirviera para las sucesivas etapas del bebé. Su inspiración proviene de recuerdos o colores favoritos de sus clientes, pieza clave en sus diseños.
Cuando proyectó este cuarto infantil encontró la inspiración en dos colores: el turquesa y el amarillo. Partiendo de un espacio bastante grande, por cierto, lo distribuyó en dos zonas, delimitadas por alfombras con estos dos colores: la de dormir en la que se encuentra la cuna del bebé y que es la que recibe mayor cantidad de luz, y la de almacenamiento, a la que le añadió una gran estantería que cubre toda la pared y una cómoda para guardar la ropa. En definitiva es un cuarto infantil que encuentra el equilibrio perfecto entre el diseño, el orden y la funcionalidad.
Diseño: Mandarina Studio, Vía: House of Turquoise
Las tonalidades aplicadas en la decoración de esta habitación infantil me parecen estupendas. Ese tono blanco predominante marcado por la combinación con el amarillo y algún punto en azul le da un aspecto alegre y luminoso. La cómoda es una preciosidad, nos encanta.
ResponderEliminarBesos
Preciosa esta decoración y los detalles en turquesa...perfectos.
ResponderEliminarBesos de las dos
Hello there!!
ResponderEliminarThat is a great, sunny room with many windows! That 2 colors are working good together! Have a nice WK!